NOTICIAS

Si algo define a este nuevo restaurante en Polanco es su capacidad para transportarte a la cocina familiar, a un local de mercado donde compartes mesa con desconocidos y a las mismas calles de Oaxaca para disfrutar un tejate y una tlayuda. Todo eso y más es Xilote, un proyecto con esencia mexicana en el que vas a comer delicioso, pasar un rato agradable y recordar esos platos que tanto nos gustan por su significado para el paladar y el alma. ¿Vamos a conocerlo?

 

Xilote: un comedor hecho por manos oaxaqueñas

Aunque puede parecer que este nuevo restaurante de Polanco muestra las recetas más conocidas del estado de la Guelaguetza, su esencia va más allá. Para empezar, está el nombre, que hace referencia a ese momento en el cultivo del maíz cuando ya se han formado los primeros dientes de la mazorca y se asoman en la punta los pelos amarillos. Esa es la señal de que el maíz ya se ha logrado, y que en próximas semanas estará listo para cosecharse.

Luego, viene el corazón del proyecto: todos los involucrados son de Oaxaca, así que cada plato que se cocina tiene esa sazón característica y la confluencia de ingredientes de la región. De hecho, el chef a cargo de Xilote es Carlos Galván, el mismo que está al frente de Guzina Oaxaca, un restaurante con reconocimiento en la Guía Michelin 2024 por una propuesta vanguardista que recorre todas las regiones de Oaxaca.

Además, en Xilote está el énfasis en recuperar sabores de casa. El menú de este nuevo restaurante en Polanco se alimenta de los recuerdos del equipo de cocina para ofrecer al comensal platos que nos llevan a una comida en casa de la abuela o de nuestros padres, donde abundan recetas sencillas hechas con mucho corazón y elementos comunes de toda la vida: maíz, chiles y frijoles.

Finalmente, Xilote es un homenaje a la experiencia de comer en un mercado. El equipo de diseño, Espacio 18, se inspiró en el tradicional pasillo de humo del mercado 20 de noviembre, en la capital oaxaqueña, y llevó esa idea a una atmósfera simple pero confortable, con varios acentos marcados por piezas artesanales y de tradición. Pero, quizá lo más importante, es que compartirás la mesa con otras personas, y que los asientos son bancas comunitarias al estilo de los locales mexicanos. Así que prepárate para hacer amigos mientras comes.

 

¿Qué comer en este nuevo restaurante de Polanco?

Nuestra experiencia fue amplia y con muchas porciones del menú: comenzó con una mezcalita a base del destilado de la casa, traído de San Dionisio Ocotepec, Oaxaca, y hecho con maguey espadín joven.  El resultado es un coctel que abre muy bien el apetito, porque combina el sabor saladito y picante en el escarchado, con un preparado en el que se matiza la potencia del mezcal.

Después elegimos un poco de todo: tlayudas de setas al ajillo y otra de tripa con chorizo oaxaqueño, todas con su respectivo asiento, frijoles y quesillo que le dan el toque especial. También probamos una tostada de salpicón de cecina de Yecapixtla, y los tacos dorados con pollo y mole negro oaxaqueño, en los que comprobamos por qué el mole es esa receta que siempre nos alegra el paladar.

Para los fuertes, hubo tres guisados a los que podríamos volver una y otra vez: costilla de puerco en salsa morita, chile de agua relleno de picadillo y el pipián verde con res. Los acompañantes fueron arroz, frijoles y tortillas.

Y de postre, algo refrescante y con esencia oaxaqueña: nieve de leche quemada. También, disfrutamos del agua de la casa hecha con maíz, aunque si buscas algo de alcohol, está el mezcal derecho y dos opciones de vino mexicano en lata: uno rosado y otro blanco.

De todo este festín, sería difícil elegir un favorito. Pero lo cierto es que cada bocado es una mezcla de colores, texturas y sabores inolvidables. Así que la recomendación es que vayas con varias personas para poder disfrutar del mayor número de platillos y no te quedes con las ganas de nada.

En síntesis: Xilote es más que un nuevo restaurante oaxaqueño en Polanco; más bien es ese espacio reconfortante en el que seguro vas a comer muy bien y disfrutar como si te sentarás a la mesa en tu casa (o en Oaxaca). ¿Ya se te antojó probarlo? 

 

Dónde: Lago Filt, Granada, CDMX

CH: $400 pesos

IG: xilote.cdmx

FUENTE: Food and Travel México.