¿SE PUEDE COMER LA NOCHEBUENA?, DESCUBRE SU LUGAR EN LA GASTRONOMÍA MEXICANA
Fuente: Bistronomie · El Economista | Publicado: Diciembre 13, 2024
La nochebuena, símbolo de la Navidad mexicana, no solo adorna hogares: también tiene un lugar en la gastronomía. Aprende cómo se transforma en un ingrediente único y por qué su toxicidad es un mito desmentido.
Cada 8 de diciembre, México rinde homenaje a la nochebuena, una flor que es sinónimo de Navidad. Aunque tradicionalmente asociada con la decoración, esta flor, conocida internacionalmente como poinsettia, está ganando terreno en las cocinas más creativas del país. Sin embargo, su incursión gastronómica ha estado rodeada de dudas, principalmente por la idea errónea de que es tóxica.
El mito de la toxicidad de la nochebuena proviene de interpretaciones incorrectas de estudios pasados. Hoy, se sabe que la flor no es venenosa, aunque su savia puede causar irritación leve en personas con piel sensible. Esto significa que, con el manejo adecuado, es completamente segura para el consumo humano. Este factor ha despertado el interés de chefs y mixólogos, quienes han comenzado a explorar su potencial culinario.
La nochebuena en la gastronomía
En la cocina, los pétalos de la nochebuena son apreciados por su color vibrante y su textura suave. Aunque su sabor es sutil, se utiliza para añadir un toque visual y simbólico a los platos. En el estado de Oaxaca, algunos chefs han innovado con tamales dulces adornados con pétalos frescos, mientras que, en la Ciudad de México, la flor ha sido transformada en jarabes para cocteles, creando bebidas únicas que combinan tradición y modernidad.
Además, la nochebuena se ha usado para preparar infusiones, jaleas y ensaladas. Su tono rojo profundo realza visualmente las preparaciones, convirtiéndola en un elemento especial para las mesas navideñas. En restaurantes de alta cocina, cada vez es más común verla como un adorno comestible en postres, ensaladas y hasta en platos principales.
Símbolo cultural que trasciende
La historia de la nochebuena está profundamente arraigada en la identidad mexicana. Los mexicas la conocían como cuetlaxóchitl, que significa "flor que se marchita". Para ellos, representaba pureza y renacimiento. Hoy, esta flor no solo simboliza la Navidad, sino que se reinventa como un puente entre el pasado y el presente en las mesas de todo México.
Consejos para cocinar con nochebuena
Si quieres experimentar con esta flor en casa, asegúrate de usar nochebuenas cultivadas de forma orgánica, libres de pesticidas. Lava los pétalos cuidadosamente y úsalos como decoración o infusión. Su versatilidad permite incluirlos en postres, bebidas o platos fríos. Aunque su sabor es suave, su presencia visual y su simbolismo enriquecen cualquier creación culinaria.
Así, la nochebuena, antes reservada solo para adornos, está floreciendo en un nuevo ámbito: el de la gastronomía. Su belleza y versatilidad la convierten en un ingrediente que no solo decora, sino que también cuenta historias en cada plato. Este Día Nacional de la Nochebuena, ¿te atreves a probar?.
FUENTE: Bistronomie · El Economista.
