El pasado martes 19 de marzo, la Asociación Mexicana de Restaurantes celebró su junta de Consejo Directivo seguida de la ya tradicional Comida Mensual, en esta ocasión, en el restaurante Potzollcalli, ubicado en Av. Cuauhtémoc 249, Roma Norte, en la Ciudad de México.
La reunión del Consejo Directivo transcurrió de manera eficiente y productiva, siguiendo rigurosamente la Orden del Día establecida. Entre los puntos más destacados, se presentó el Informe del Lic. Fernando del Moral, Vicepresidente de Capacitación, referente al Primer Trimestre del 2024. Además, se abordó la temática de la Incursión Integral de la Industria Restaurantera, de la mano del Lic. Arturo Anaya. Por último, se llevó a cabo la presentación de la empresa BAKAN, especializada en mobiliario para restaurantes, brindando una visión innovadora para el sector.
Tras la conclusión de la junta, los participantes tuvieron el placer de disfrutar de exquisitos Jamones Ibéricos provenientes de España, deleitando así sus paladares con un toque de distinción.
El menú preparado para la ocasión fue una verdadera muestra del arte culinario mexicano:
- Menú de Bienvenida: Sopecitos acompañados de un cóctel de bienvenida “Cantarito Loco”, que despertó los sentidos y anticipó el festín gastronómico que seguiría.
- Primer Tiempo: Los comensales tuvieron la difícil elección entre una exquisita Sopa de Fideo o una tradicional y reconfortante Sopa Azteca.
- Segundo Tiempo: Una elección entre dos ensaladas emblemáticas: la refrescante Ensalada Chiapaneca o la auténtica Ensalada de Nopales, resaltando los sabores y colores de México.
- Tercer Tiempo: El plato principal ofreció una gama de sabores representativos de la cocina mexicana, desde las clásicas Enchiladas de Mole Poblano hasta el contundente Platón Yecapixtla, satisfaciendo los paladares más exigentes.
- Postre: Para culminar esta experiencia gastronómica, se ofreció el indulgente Nevado de Chocolate o el clásico Panqué Doña Inés, endulzando el final de la comida.
Para acompañar este exquisito festín, se sirvieron selectos vinos cortesía de La Castellana: el robusto Luna del Valle Luz, un vino tinto Tempranillo, y el fresco Marijá, un vino blanco Chenin Blanc, que realzaron los sabores de cada plato y complementaron la experiencia culinaria.
La jornada en Potzollcalli no solo fue un encuentro del Consejo Directivo, sino también una celebración de la riqueza gastronómica mexicana, donde la calidad y la innovación se fusionaron para deleitar a los asistentes en cada bocado y sorbo, consolidando así a este restaurante, como un referente indiscutible para la alta gastronomía en México.
