El sector se encuentra abrumado ante las semanas de desastres.
Después del devastador sismo vivido el pasado 19 de septiembre en los estados de Puebla y Morelos, así como en la Ciudad de México, una de las industrias más relevantes en el futuro inmediato será la de los seguros. No solo habrá millones de personas quienes cuenten con las indemnizaciones contratadas para salir adelante, también las mismas compañías deberán hacer decisiones estratégicas en los próximos días con el fin de continuar operaciones y apoyar a sus clientes de forma efectiva.
En cuanto a su compromiso con la ciudadanía, las empresas del sector cumplirán sus obligaciones de la forma más rápida y conveniente posible. Prueba de ello es la declaración realizada por la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), la cual publicó un comunicado horas después del movimiento telúrico, donde se aseguraba, "las aseguradoras están listas para ayudar en lo necesario y mantienen el firme compromiso de dar atención oportuna, así como hacer una estimación responsable de los daños ocasionados por el sismo ocurrido".
De acuerdo al director de daños de la AMIS, Efe Luis Álvarez, los agremiados cuentan con 56 mil millones de dólares (mdd) para cubrir sus pólizas. Al cierre de esta edición, ni el gobierno federal ni las administraciones estatales han realizado un estimado de daños; pero el directivo de la Asociación se muestra confiado en la capacidad del gremio de seguros para cubrir los gastos. Además, recordó que el terremoto del 85, el cual tuvo una intensidad 10 veces mayor, representó un costo de aproximadamente 3 mil 360 mdd a precios actuales.
“La industria de seguros espera que el sismo de este martes solo represente una fracción del costo registrado en el 85”.
Sin embargo, el sector tiene una importante carencia en sus nóminas y esto lo deja poco preparado para encarar situaciones como la de las últimas semanas, con la conjunción de múltiples desastres naturales en varios puntos del país. El director general de la AMIS, Recaredo Arias, estimó un número de mil 400 ajustadores de seguros a lo largo de todo el país para atender las solicitudes de la población; pero la amplia mayoría aún atiende a los individuos vulnerados por la tormenta tropical Lidia.
Con los sismos ocurridos en México en las últimas dos semanas, las aseguradoras se han visto rebasadas en su capacidad y deberán recurrir a la contratación de personal extranjero para atender a la población. Arias afirmó que existe comunicación cercana con despachos internacionales y "colegas de otros países" para la llegada de personas en apoyo a los operadores mexicanos.
Múltiples expertos en materia económica de varios bancos dentro de México han estimado que el sismo no debería afectar de forma radical a la economía mexicana; pues gran parte de las actividades productivas de la capital pudieron restaurarse a unas horas del desastre. Sin embargo, la industria de las aseguradoras, a pesar de su preparación para afrontar este evento, podría verse impactada de forma negativa en sus balanzas comerciales.
FUENTE: My Press.